El jefe de la Policía local, Nazarul Fitra, afirmó que fueron vistos besándose y los siguieron hasta la casa del joven donde se encerraron en una habitación. Los vecinos sospecharon que iban a tener relaciones sexuales y los arrastraron a la calle.
Los policías llegaron al lugar poco después de que comenzara su humillación, y los trasladaron a ambos a una comisaría local tras permitirles limpiarse en un arroyo.
Ahora, la pareja podría enfrentar una condena de azotes que nuevamente se llevará a cabo en público si se los encuentra culpables. El jefe de la Policía sostuvo que después de la humillación, la pareja fue llevada a la sede de la Policía de la moral.