Todos los participantes del evento vivieron una jornada llena de entretenimiento y de explorar a fondo los detalles sobre esta bebida emblemática, desde la parte agronómica con un recorrido por los viñedos, la parte enológica y el proceso de destilado. Además aprendieron a preparar el trago emblema, el “chuflay” y a realizar sus propios cócteles de Singani.
Las mujeres participaron en la tradicional pisada de uvas, un momento especial para quienes por primera vez presenciaban esta actividad. Los varones participaron de juegos de cacho para ganar las “monedas de la vendimia” que eran intercambiadas por chuflays. El sabor no podía faltar y se preparó un riquísimo costillar de cerdo a la cruz, un plato tradicional de la gastronomía tarijeña.